lunes, 6 de enero de 2014

El arte de pedir perdón


La clave para conseguir una buena convivencia no está en evitar las discusiones (algo prácticamente imposible) sino en saber gestionar  los conflictos. Tragarnos el orgullo y reconocer nuestros propios errores nos ayudará a conseguirlo.

  • Para disculparse de forma sincera, lo primero que hay que hacer es aceptar que nos hemos equivocado y que nos sentimos mal por ello, por lo que necesitamos hablar con nuestra pareja sobre ello.
  • El segundo paso es dejarnos el orgullo en casa. Sólo así podemos hablar con calma y sinceridad.
  • También es importante respetar el enfado de nuestra pareja. Si se siente ofendida, es muy probable que no acepte nuestras disculpas a la primera. Lo más normal es que necesite tiempo para poder perdonarnos.
  • No debemos permitir que las disculpas generen una nueva discusión. Para ello, usaremos en todo momento un tono conciliador e intentaremos comprender la postura de nuestra pareja. Y, sobre todo, no debemos caer en la tentación de hacer reproches ni acusaciones, ya que, de esta manera, tan sólo conseguiremos echar más leña al fuego.
  • Saber gestionar este tipo de conflictos fortalece a la pareja, tanto a corto como a largo plazo. Ahora bien, es importante que no siempre sea el mismo el que tiene que pedir perdón. Se trata de un esfuerzo que debe realizarse de forma mutua. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario